lunes, 27 de abril de 2009
La semana pasada vimos el deplorable espectáculo ofrecido por “Pepe”, el central del Real Madrid que en un presunto ataque de enajenación mental, propinó patadas, puñetazos e insultos a rivales y árbitro. La sanción que ha recibido este jugador ha sido de 10 partidos oficiales sin jugar. Una vergüenza.
Cobrar las cantidades que cobran estos jugadores, que son el espejo en el que se miran miles y miles de jóvenes, hace que se les suponga profesionalidad, entendiendo a esta no solo como el hecho de cobrar unas cantidades que te permitan vivir de este deporte, si no como ejemplo de intentar hacer bien tu trabajo. Cuando una persona hace algo como lo que hizo “Pepe”, simplemente debe ser apartado de por vida del deporte de élite. No hace falta decir mucho más, de la misma forma que no hace falta ser o no de ese equipo para sentir vergüenza ajena ante esas imágenes.
Por otro lado, tenemos al famoso ultra “Santos Mirasierra” que fue detenido por agredir a la policía en un partido de Champions entre At. de Madrid y Olimpique de Marsella. Este ultra fue condenado a tres años y medio de prisión, ante la estupefacción de gran parte de la hinchada de su equipo, el propio presidente del mismo e incluso el ejecutivo galo, que hizo gestiones para conseguir la liberación del personaje en cuestión que poco menos que era un santo injustamente tratado por los españoles que buscaban un chivo expiatorio en su persona. El angelito salió en libertad con fianza de 9000 euros y ayer fue detenido en Lille por “presuntamente participar en la agresión de una persona que llevaba una camiseta del PSG, que tuvo que ser atendida en el hospital”.
Pero como el tiempo pone a cada uno en su sitio, Ramón Calderón, Ex-Presidente del Real Madrid, tuvo que salir del club por la puerta de atrás después de mantener una política de apoyo encubierto a los Ultra Sur, llegando estos incluso a alborotar en la famosa asamblea que le costó la cabeza al ex-mandatario blanco. Por su lado, Joan Laporta, Presidente del Barça, ha tenido que aguantar más de una amenaza precisamente por lo contrario.
Sin embargo, no hace falta moverse en el entorno del fútbol para respirar violencia. Hoy en Gandia hemos amanecido con la denuncia del Col•lectiu de Lesbianes, Gais, Transsexuals i Bisexuals de La Safor al respecto de un ataque fascista y xenófobo contra su sede, con esvásticas y puntos de mira incluídos entre las pintadas en la fachada.
Distintos tipos de violencia y distintos tipos de actitudes frente a ella. No toda la violencia es igual. La última que he citado es la más repudiable, sin lugar a duda, por dirigirse contra la libertad de las personas, pero al fin y al cabo, todas son detestables.
Sobre el autor
Es la segunda etapa del blogEn los últimos años, tanto en mi actividad profesional, como la política y la personal, siempre me ha gustado estar en contacto con la gente y creo sinceramente que expresar las ideas de uno mismo es importante, pero no más que tener la oportunidad de que otr@s nos aporten las suyas, aunque en ocasiones pueda no gustarnos. Estos años he tenido la suerte, entre otros cargos, de haber sido portavoz del PSPV-PSOE en Almiserà, Secretario de Nuevas Tecnologías y administración, de la agrupación del PSPV-PSOE de Gandia y en el Ayuntamiento de Gandia he ocupado diversos cargos, entre ellos el de Responsable de Comunicación y Relaciones Sociales.
1 comentario:
Este blog se basa en la colaboración del autor y vosotros. Intentemos entre todos ser respetuosos, no únicamente conmigo, también con terceras personas, así nos evitaremos comentarios sobre censura, porque no se permitirá insultar a nadie. Esos comentarios no verán la luz. Gracias por vuestra colaboración.
Qualsevol tipus de violència és detestable. No per això deuries criticar aquells que rebutgen de forma genèrica aquestos atacs.
ResponderEliminarTambé pense que tens raó en la reflexió. La Comissió Antiviolència deuria sancionar durament també als directius dels equips que no intenten allunyar als violents dels estadis.